* Como dijo Peter Drucker: “el secreto de la efectividad es la capacidad de mantener la atención”. Lo conseguimos gracias a nuestra mente ejecutiva.
*La mente humana que del tiempo de vigilia total a lo largo del día, tiende a la dispersión al menos un 50% de las veces, encuentra en nuestros días muy difícil el hecho de mantener la atención por mucho tiempo en una sola cosa. Es cuando se dispara la Red Neuronal por Defecto, desvinculándonos de la parte cerebral que nos permite aprender, memorizar, recordar, y especialmente hacer las cosas conscientemente para poder hacerlas bien, poder vivirlas con plenitud, incluso no ponernos en peligro vital.
*La cantidad ingente de rápidos estímulos distractores, muchos de los cuales nos llegan a través de las pantallas, especialmente del móvil, disminuyen la atención que necesitamos no solo para ser más efectivos, sino para ser más felices, para estar más satisfechos.
*Cuando la mente no está centrada en alguna cosa, lo que sea, y solo en esa cosa, se pierde en ella misma a través de millas, millones de estímulos que prometen recompensa inmediata. Y eso es lo que nos gusta, la promesa de recompensa que tienen estos infinitos estímulos distractores. Dichos estímulos, llamémosles “paja”, consiguen que nuestra mente se ponga a funcionar emitiendo pensamientos inservibles, ya veces obsesivos, sobre nosotros y las cosas. Pensamientos que no reconocemos como cuentos pero con los cuales nos identificamos y hacemos que parezcan reales, es decir, nos dejamos llevar por nuestra mente divagante a escenarios que solo están en nuestra imaginación.
*Hoy día, inmersos en la sociedad de la rapidez, es más necesario que nunca cultivar la Atención Plena, la observación de las cosas y la contemplación.
*Solo no tratando de encontrar recompensas inmediatas a todas horas a través de los miles de estímulos distractores disponibles, y abriéndonos mentalmente al aburrimiento, a la curiosidad, podemos ver como las cosas ocurren, y vivir nuevas cosas enriquecedoras.
*Si no tratamos de buscar siempre la pronta gratificación, podremos desarrollar esta parte de la mente que nos permite abrirnos a la conciencia y darnos cuenta realmente de las cosas que suceden a nuestro alrededor, y también dentro de nosotros.
*La vida está hecha para vivirla, no para pensarla.
Lola López